Historia de las Leyendas de Camelot

Época Posromana – La Temprana Edad Media

 

 

 

Parte I
Albión por su cuenta
 

Los conflictos que el Imperio Romano tenía con los pueblos bárbaros crecieron, y comenzó a debilitarse. Antes de que Roma abandonara Britannia, se levantó una débil defensa contra las incursiones realizadas por corsarios sajones, quienes saqueaban e intentaban llevarse a los esclavos.

En el año 410, la ciudad de Roma fue saqueada por primera vez en 800 años, a manos de los visigodos (godos del oeste) dirigidos por Alarico. Para defender Italia, las legiones romanas se retiraron de Britannia, después de 400 años de ocupación.

El idioma y costumbres celtas comenzaron a resurgir. Britannia se fragmentó en pequeños reinos que surgían, desaparecían y cambiaban. Algunos de los más conocidos son Dumnonia, Lundein, Powys (cuyos gobernantes aseguraban descender de Magno Máximo), Gwynedd y Strathclyde.

Tras la retirada, los irlandeses y pictos comenzaron a incursionar cada vez más a Britannia. Se pidió la ayuda del emperador Honorio del Imperio Romano de Occidente, pero no teniendo la capacidad de enviar apoyo, habría escrito que “se defendieran por su cuenta” en el texto conocido como el Rescripto de Honorio.

A esta época pertenece el rey Arthwys (nacido en 455), hijo del rey Masguic Gloff de Ebrauc, al norte de la actual Yorkshire. A su muerte, se dividió este reino entre los hijos de Arthwys, Eliffer GosgorddfawrPabo Post Prydein.

Fuera de esto, no se conoce mucho más de la vida de Arthwys, pero es posible que sus logros ayudaran a dar forma a las hazañas de Arturo.

Annales Cambriae

Es en el año 447 en el que se escribe la primera entrada de los Annales Cambriae o Anales Galeses, una crónica en latín que abarca más de 500 años. Sin embargo, esta no es una fuente contemporánea.

La versión más antigua de los Annales data del año 970, usando como referencia principal una crónica conservada en la ciudad de St. David´s, complementada con la información de una fuente del norte de Bretaña y de un conjunto de anales irlandeses, entre finales del siglo XVIII y el año 950.

Las entradas correspondientes a la leyenda artúrica probablemente han sido alteradas o agregadas a mediados del siglo IX. Aun así, las mencionaré más adelante.

El rey Riothamus

Una figura histórica identificada con Arturo aparece en la historia varias décadas antes del periodo tradicional artúrico, cuando el rey Eurico del Reino Visigodo ascendió al trono en el año 466 y se enfrentaba al Imperio Romano de Occidente en su camino a Galia (Francia).

Narra el historiador Jordanes en Getica u Origen y hechos de los Godos, que a petición del Emperador Antemio, llegó el comandante de los bretones: el Rey Riotimus, de quien no se conoce su nombre, pues se trata de un título que significa Gran Rey.

Ahora Eurico, rey de los Visigodos, percibió el frecuente cambio de Emperadores Romanos y buscó tener a Galia por derecho propio. El Emperador Antemio escuchó de esto y pidió a los Bretones ayuda. Su Rey Riotimus llegó con doce mil hombres al estado de los Bituriges por el Océano, y fue recibido al desembarcar. Eurico, rey de los Visigodos, fue contra ellos con un innumerable ejército, y después de una larga lucha derrotó a Riotimus, Rey de los Britones, antes de que se unieran los Romanos a él. Así que cuando ya había perdido una gran parte de su ejército, huyó con todos los hombres que pudo reunir y llegó con los Burgundios, una tribu vecina entonces aliada con los Romanos…

En la Historia de los francos de Gregorio de Tours no se menciona a Riothamus pero si una derrota de los britanni:

Ahora Childerico luchó en Orleans y Odoacro llegó con los Sajones a Angers. […] Egidio murió y dejó un hijo, de nombre Siagrio. A su muerte Odoacro recibió rehenes de Angers y otros lugares. Los Britanni fueron expulsados de Bourges por los Godos y muchos fueron asesinados en la villa de Déols…

Finalmente, en el año 470, Sidonius Apollinaris, senador y obispo, escribió la siguiente carta:

A su amigo Riothamus

Una vez más escribo en mi estilo usual, mezcla de lisonja y agravio. No es mi deseo continuar después de palabras de felicitaciones, con temas desagradables. Pero las cosas parecen siempre ocurrir y por ser un hombre de orden y posición no puedo dejar de mencionarlo sin desagrado, ni dejarlo pasar por alto olvidando mi deber.

Aunque hago lo mejor que puedo recordando el gravoso y delicado sentido del honor que hace que usted esté pronto de sonrojarse por las faltas de otros. El portador de ésta es una persona humilde y oscura, tan indefensa, insignificante y desvalida que pareciera invitar a su propia derrota. Su pesar es que los britanos están secretamente tentando la huida de sus siervos. Sea esta denuncia verdadera o no, no lo puedo decir. Pero si usted puede confrontar las partes y decidir sobre el asunto según los méritos, pienso que el desafortunado hombre puede ser capaz de hacer bien el cargo. Si verdaderamente un extranjero del país desarmado, abyecto y sin dinero ni ganancias, puede tener una justa oportunidad o bondadosa audiencia contra sus adversarios con todas sus ventajas de las que carece: armas, astucia, turbulencias y el espíritu agresivo de los hombres respaldados por numerosos amigos. Adiós.

Parece ser que el rey desembarcó en la Galia y llegó al territorio de la tribu biturige para defender la región del río Indre, el cual es un afluente del río Loira. Tras la derrota en Déols en el 468 o 469, Riothamus retrocedió y se teoriza que habría desaparecido o muerto en la localidad de Avallon, al centro este de Francia.

Existe una duda respecto a de dónde llegó el Rey Riothamus, pues podría haber sido el gobernante en la isla de Bretaña, o del Reino de Domnonee, en Armorica, la región costera más norteña de Francia. Uno de los gobernantes de esta región se llamaba Riatham, hijo del Rey Deroch II, cuyo trono recuperó tras volver del exilio y matar al usurpador Marchell. Sin embargo, podrían tratarse de dos personas distintas.

Riothamus al viajar al continente, recuerda a las acciones del Arturo descrito por Geoffrey de Monmouth en su Historia Regum Brittaniae (la cual veremos más adelante), pero no coincide con historias que se contaban mucho tiempo atrás de su personaje.

Rey en los Peninos

En Britannia del Norte, entre los años 470 y 540 vivió Arthwys ap Mor, nieto de Coel Hen, un gobernante celta que tal vez fuera el último Dux Britannorum (comandante en el área del Muro de Adriano), gobernando desde las actuales Cheschire, el norte de Staffordshire y Derbyshire hasta Yorkshire del Este.

Tras la muerte de su padre, Mor ap Cenau, el reino se dividió y Arthwys gobernó en el área de los Montes Peninos, en un área desde donde podría combatir a los anglosajones.

Por su ubicación en el norte y pertenecer al periodo tradicional de la leyenda, Arthwys podría haber luchado las 12 batallas descritas por Nennius, por lo que sus hazañas tal vez se convertirían en las de Arturo.

Hermano del rey

Arthwys ap Masgwid nació en el año 475 en la capital del reino de Elmet, cerca de la actual ciudad de Leeds.

Gwrast Lledlwm, el abuelo de Arthwys dejó su reino a manos de su segundo hijo Masgwid, pues esperaba que su familia comandara la región que había quedado aislada tras la muerte de Mor ap Ceneu. Cerca del año 495, el hijo de Masgwid, Llaennog, tomó el mando de Elmet.

No se sabe mucho de su hermano Arthwys, pero lo más probable es que luchara contra los pictos y escotos y que nunca ascendiera al trono.